Alargamiento y engrosamiento quirúrgicos del pene

Técnica quirúrgica de engrosamiento

El engrosamiento del pene lo realizamos con grasa del propio paciente, mediante el denominado trasplante de grasa autóloga (por favor, no debe confundirse con la simple inyección de grasa que suelen utilizar a menudo los cirujanos inexpertos).

El engrosamiento es, si se mira bien, el paso más complicado en el proceso de agrandamiento del pene, ya que deben tenerse en cuenta muchas cosas para conseguir un buen resultado a largo plazo.

Si, por ejemplo, un cirujano inexperto en esta técnica le extrajese grasa y se la inyectara bajo la piel del pene, ésta se mantendría como mucho durante seis meses, después el propio cuerpo la degradaría. Se necesita un procedimiento especial y habilidad para conseguir un engrosamiento duradero del pene.

Nuestra técnica: nosotros le extraemos tejido adiposo de la parte interna del muslo con una técnica especial. Preparamos y limpiamos este tejido minuciosamente y, después, lo introducimos bajo la piel del pene mediante un complicado procedimiento, de tal manera que, una vez terminado el proceso de curación, el pene quede proporcionado.

Para lograr un buen resultado, el paciente deberá llevar, durante una semana, un vendaje colocado mediante una técnica especial y con una presión graduada.

De vez en cuando, algunos pacientes nos comunican su preocupación relativa al éxito del engrosamiento con grasa propia. Tienen miedo de que ésta fuese absorbida una y otra vez; eso es lo que han escuchado o leído en algún sitio.

Por eso, hay que recordar de nuevo la enorme diferencia que existe entre un “trasplante de grasa autóloga” (nuestra técnica) y una “inyección de grasa”. Si tiene interés, puede leer por ejemplo, la obra estándar de Krupp y Rennekampff “Cirugía Plástica”. En esta obra se califica el uso de grasa del paciente conforme a los cánones profesionales como “el estándar de oro” (edición 3/2005). La obra de Krupp y Rennekampff se reconoce como “la gran obra fundamental alemana de Cirugía Plástica” (Lehmann) o también como “la obra fundamental actual” (medizin.de).

Quién siga diciendo pues que el tejido adiposo implantado de acuerdo a los cánones de la especialidad volvería a degradarse en principio, carece de conocimientos sobre las técnicas quirúrgicas modernas.

El engrosamiento con grasa propia se suele combinar con el alargamiento.